Cocina griega: la moussaka

Cocina griega: la moussaka

Este delicioso plato tradicional de los Balcanes y Oriente próximo se dio a conocer en todo el mundo como receta típica griega, cuya forma de elaboración es la más común en aquellos países de los que no es originaria.

Proviene, al igual que el propio nombre, de la gastronomía árabe, en la que la moussaka es un aperitivo frío consistente en una ensalada de tomates y berenjenas cocidas. Ésta hortaliza es también un ingrediente fundamental en la versión griega, mientras que en las típicas de otros países, como Bulgaria o Serbia, se sustituye por la patata.

La receta griega más común de la moussaka contempla una disposición en estratos o capas, al estilo de la lasaña: una inferior, formada por rebanadas de berenjena sofritas en aceite de oliva, una intermedia, compuesta por tomate y cordero cocido machacados, y una superior, a veces inexistente, que puede ser de bechamel o crema. Toda esta nutritiva torre se suele espolvorear con queso gratinado o pan desmigado, y puede presentar variaciones incluso sin salir de Grecia; a veces se emplean otros vegetales además de la berenjena, como calabacines o champiñones, e incluso existen versiones adaptadas a la época de Cuaresma, que por supuesto no contienen carne y, en ocasiones, ni siquiera salsa.