Origen y preparación de la feijoada

Cocina brasileña: la feijoada

Lo sabroso de la feijoada ayuda a adivinar su procedencia: Brasil, país de gran sabor cultural y festivo, donde es considerado plato nacional. También es una receta de gran popularidad en el norte de Portugal, zona en la que probablemente se empezó a cocinar la feijoada antes de ser transmitida al país carioca durante la época colonial.

Al parecer, según han ido exponiendo muchos estudiosos de la cultura brasileña, la feijoada es un plato que comenzó a prepararse en el ámbito social de los primeros esclavos llegados de África a mediados del silo XVI. Se creó a partir del aprovechamiento de la comida que sobraba tras cada banquete o festín celebrado por los terratenientes y dueños de las plantaciones, restos que estos esclavos mezclaban con frijoles para dar lugar a un nuevo guiso.

Efectivamente, el frijol es el ingrediente principal de la feijoada; en Brasil los preparan con una variedad de color negro, mientras que en Portugal prefieren los blancos o los rojos. Estas legumbres se combinan con casi cualquier carne de cerdo, desde el lomo hasta la lengua, en salazón o ahumada, y se acompaña de arroz, naranja, coles y otros alimentos que hacen las veces de guarnición, pues no siempre se mezclan todos los ingredientes. En Brasil, además, es corriente sazonar el guiso con harina de mandioca, conocida allí como farofa.

La tradición es comerse un buen plato de feijoada los miércoles o los sábados, en una reunión familiar o en solitario si procede, lo cual no es difícil pues muchos restaurantes lo ofrecen en sus menús. Es un plato barato que se consume tanto entre las clases altas como las bajas, y que sin duda se digiere mejor si se acompaña de una caipirinha bien preparada.