Chicago, la ciudad del viento

Chicago es una de las ciudades más grandes y conocidas de Estados Unidos. Situada en el nordeste del país, es conocida con el poético nombre de “La ciudad del viento” por su clima, lleno de cambios de temperatura, viento y lluvia incómoda para los viandantes.

Si vas a visitarla, lleva ropa para cualquier clima, porque es impredecible. Los cambios de temperatura en el mismo día son conocidos por todos: cambia el viento, se cubre el sol y en cuestión de minutos está lloviendo. En verano es habitual que se mezcle una alta temperatura con semanas sin parar de llover. Hay mucha humedad y lo normal es que se superen los 35º. Así que lo mejor es armarse de paciencia e ir preparado para todo.

No se conoce al detalle cuando se fundó la ciudad, aunque se menciona en algunos escritos de 1679. La lluviosa ciudad de Illinois es a día de hoy uno de los grandes motores económicos del país y la tercera ciudad más poblada. La zona central es de obligada visita, los enormes rascacielos situados junto al lago son impresionantes. También es recomendable acercarse al Instituto de Arte de la ciudad y el edificio de la ópera.

Tiene muchos locales con comida de gran calidad. La carne es un elemento habitual en casi todos los restaurantes y una cerveza para acompañarla es lo mejor. También tiene muchos bares y pubs a los que acercarse a tomar algo. A pesar de su tamaño, Chicago es una ciudad en la que es fácil sentirse integrado. Muchos foráneos se han acercado durante el último siglo a formar parte de las grandes empresas que hay en la ciudad. Puede que esté oculta bajo las conocidas Nueva York o Los Ángeles, pero Chicago cuenta con motivos de sobra para merecer ser visitada en cualquier visita a Estados Unidos. Eso sé, hay que ir preparado, en cualquier momento puede demostrarte porque se llama “la ciudad del viento”.